25 de enero de 2012

Ciega

Unos policías norteamericanos clausuraron un sitio en internet y apresaron a su administrador. El motivo: ese administrador permitía que en sus servidores se almacenara información y, además, cualquiera podía bajar esa información a sus equipos personales. El problema es que ni lo uno ni lo otro reportaban beneficios económicos para los autores de esa información. Ahora se enfrenta a una condena de unos 50 años de prisión. En enero de 2009, en Sevilla, un hombre mató a una mujer. Lo apresaron y estuvieron juzgándolo hasta enero de 2012, mes en que se dictó sentencia. Fue condenado a 20 años de cárcel. Más allá o más acá de los pormenores de cada caso, estos dos resultados me consternan y me hacen dudar mucho de la administración de justicia en algunas sociedades occidentales. Para mí está claro que vale más una vida que una canción, pero para la ley no. Si tomamos como criterio el montante de las penas, el pirata cibernético es peor que el asesino flagrante y alevoso. Imagino que a esto se refieren cuando dicen que la justicia es ciega.

No hay comentarios:

Publicar un comentario