Estaba releyendo una de las cartas que le escribiera Myrna Minkoff al insufrible pero hilarante Ignatius J. Reilly y me topé con unas palabras desternillantes aunque no por ello menos precisas. Las transcribo a continuación porque además tienen resonancias personales. Aclaro que Myrna le contaba a Ignatius sobre una persona que había tomado por una y resultó ser otra, de allí la alegoría de la ardilla y la rata. De la idea que tuvo a partir de su encuentro con el farsante hablaré otro día. Va la cita:
The incident reminded me of the time in Poe Park when this squirrel I was feeding turned out to really be a rat which at first glance could have passed for a squirrel any day. So live and learn. This phony gave me an idea. You can always learn something from crumbs.
No hay comentarios:
Publicar un comentario