7 de octubre de 2012

Utopía


He pasado la noche en vela esperando los resultados electorales. Finalmente, ganó el que no esperaba que ganara. Es la cuarta vez que lo logra y en adelante ya no creo que abandone el poder. Se quedará allí, no porque quiere sino porque hay millones de personas que le quieren allí. Si bien prefiero las posiciones plurales y la tolerancia a la diferencia, debo decir que no comparto la posición de esas personas; tampoco la posición de los que se oponían. La razón es simple: pienso que los líderes son innecesarios. En mi utopía personal, imagino un mundo sin naciones y sin fronteras, pero sobre todo sin líderes ni banderas. Lamentablemente, esa utopía queda lejos. Muchas personas siguen pensando que deben ser guiadas por alguien y muchas personas creen estar llamadas a guiar a otras. Mientras eso sea así, seguirán los líderes, las banderas, las naciones y las fronteras.

No hay comentarios:

Publicar un comentario